Prerrogativas

El capitalismo es depredador en recursos y genera muchas desigualdades. Pero es muy eficiente.

Pienso, tal como opina Piketty en una artículo en The Guardian motivado por el auge de la extrema derecha, que no hay problema en tener un sistema económico de izquierdas, coherente con los diferentes libros que ha publicado el economista francés.

Los liberales y libertarios, que tienen su particular concepto de la anarquía, piensan que sin estado todo iría mejor.

Antes de la Gran Depresión, la economía estadounidense y muchas otras economías occidentales operaban bajo un sistema de libre mercado con una intervención estatal limitada. Las políticas de laissez-faire predominaban, y el gobierno tenía un papel reducido en la regulación de los mercados financieros y la economía en general.

Es decir, ya se probó el libre mercado sin apenas estado y no funciona.

Lo que pienso que no puede cambiar es que hayan personas por encima de otras, jefes y subordinados. Coordinadores. Personas que quieren mandar y personas que obedecen, con mayor o menor desgana.

Ese tipo de conflictos, en la vida, en la sociedad y en las relaciones interpersonales no pueden desaparecer, pues nos alimentamos, alimentamos a nuestro ego, alimentamos nuestras aspiraciones, con eso.

Muchas veces, sin esas prerrogativas, la vida pasa a no tener sentido y a ser aburrida, y eso nadie se lo puede permitir.